
Desde inicios de la emergencia sanitaria ocasionada por la pandemia Covid 19, este es el sexto retiro recientemente aprobado por el decreto ley. Si bien el propósito de dar libertad o acceso a los fondos previsionales, lo que se pretende es “aliviar la situación económica” de millones de aportantes que les permita satisfacer necesidades elementales como de educación, salud, alimentación y pago de deudas originadas por la pandemia. Quizás esta medida era considerada inflacionaria por los representantes del Ministerio de Economía y Finanzas, así como del Banco Central de Reserva del Perú, pues las proyecciones realizadas para los años 2022 a 2023 así lo demostraban, sin embargo, pese a las opiniones de reconocidos economistas, se dio inicio al registro programado para efectuar los retiros , donde los beneficiarios tendrán la posibilidad de poder retirar hasta el tope de 4 Unidades impositivas tributarias , por lo que las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) se verán en la necesidad de desembolsar unos 32,000 millones de soles, esta media hace que las AFPs recompongan sus portafolios de inversiones ( dinero de los aportantes invertidos en diversos activos financieros a un largo plazo , han tenido que ser liquidados para cumplir las obligaciones normadas por ley en un corto plazo, generando pérdida de rentabilidad).
Si bien se ha adoptado esta medida como un salvavidas a corto plazo para poder darle soporte a la situación que atraviesan los peruanos, lo que realmente se necesitan son políticas de gobierno que pretendan atacar los problemas de la raíz, lo que la mayoría de aportantes no visualiza es que el uso de los recursos en un corto plazo contrapone a los propósitos para lo cual fueron creados los fondos de pensiones, en donde lo que se busca es brindarle al afiliado una pensión de retiro, afectando las decisiones a un mediano y largo plazo.
Ante este panorama donde se puede realizar un desembolso de hasta 4 UIT equivalentes a 18,400 soles, nuevamente vienen a nosotros las interrogantes ¿Saco el dinero? ¿No lo saco? ¿Lo ahorro? ¿Lo invierto? ¿Lo gasto?. Lo que tenemos que tener en cuenta es que este dinero forma parte de nuestro fondo de jubilación y que al sacarlo disminuimos el aporte para dicho fin., por tal razón debemos de buscar información que nos permita rentabilizar nuestra decisión, tal como lo manifiesta Ramírez (2020), si decidimos retirar el dinero podemos apertura una cuenta de ahorros ,estará segura y nos permitirá poder realizar diversas transacciones, si realmente necesitamos el dinero para subsistir, hay que planificar y presupuestar el uso del dinero en los tiempos y plazos que permita satisfacer de manera holgada las necesidades, en el caso se tenga deudas se recomienda pagar las deudas que generan altos intereses , pero si se quiere invertir puedes colocar el dinero en opciones fijas como los depósitos a largo plazo, u opciones variables como invertir en fondos mutuos , comprar activos financieros, entre otros. Así mismo hay otra alternativa que traen las AFP que es invertir el dinero en las AFP, y tú te preguntarás
¿He esperado una norma para sacar mi dinero y ahora lo quiero volver a invertir en una AFP?
Sonaría descabellado pero no lo es, la AFP tiene una nueva opción de invertir tu dinero en un fondo con fines no previsionales, donde dejas el dinero y cuando los valores en las AFPs se recuperen vas a obtener rentabilidad y obtener una ganancia de la cual dispondrás en cualquier momento.
Ahora bien, tú decides la opción de retirar o no y emplearla en lo que necesites, pero tu decisión al día de hoy debe ser el de poder transmitir consejos a los que desconocen el uso consciente y eficiente de su dinero.
Lic. Adm. Mg. Sandra Lizzette León Luyo.
Docente universitaria de la Universidad Nacional de Trujillo